Conozca a Amé, nuestro especialista en desarrollo de capacidades regionales para África occidental
Desde Liberia, Amé Atsu David apoya la misión de GFC como especialista en desarrollo de capacidades.
Amén, ¿PUEDES CONTARNOS UN POCO SOBRE TU INFANCIA Y DE DÓNDE ERES?
Vengo de un hermoso país de África occidental llamado Togo. Pasé parte de mi infancia con mi familia en Gabón, África Central. También pasé algún tiempo en Benín y Ghana, países vecinos de Togo.
Cuando vivíamos en Gabón, solíamos viajar a Togo con regularidad para pasar las vacaciones y esa experiencia me hizo desarrollar una pasión por los viajes. También disfrutaba de visitar a mis abuelos en el campo. Era un placer despertarme temprano por la mañana para ir al río a buscar agua para mi abuela. ¡Qué hermosos recuerdos!
Soy la primogénita de cinco hermanas y desde muy pequeña mi padre me hizo comprender la importancia de ser un modelo a seguir para mis hermanas. Solía decirme: “hagas lo que hagas, tus hermanas seguirán tus pasos, así que siempre dales el ejemplo correcto”.
¿CUÁL ES TU RECUERDO FAVORITO DE LA INFANCIA?
Tengo un grato recuerdo de mi padre preparándome para la etapa de la pubertad. Antes de tener mi primera menstruación, cuando tenía alrededor de 11 años, mi padre me habló de los cambios que se producen durante la pubertad, se aseguró de que llevara una compresa en mi mochila y me explicó qué hacer en caso de que me llegara la primera menstruación en la escuela. No fue hasta que empecé a trabajar en temas de salud sexual y reproductiva de los adolescentes que comprendí la importancia de la preparación de la que me beneficié. La pubertad es una etapa importante en la vida de las niñas y los niños, pero para muchos niños africanos, la experiencia es traumática debido a la falta de conocimiento.
¿QUÉ TE ATRAJO A ESTA LÍNEA DE TRABAJO Y A GFC?
Me formé como traductora, pero mi vida cambió cuando, tras terminar mis estudios universitarios, me ofrecieron la oportunidad de trabajar con Save the Children Suecia en Abiyán (Costa de Marfil). Allí descubrí por primera vez el concepto de los derechos del niño. No sabía que los niños tuvieran derechos en África.
Al ver mi interés por aprender más sobre la promoción de los derechos de los niños en África, Save the Children me capacitó para ello. Me enviaron a Mali para pasar dos semanas con una organización local llamada Centro Djoliba para aprender de su trabajo sobre prevención de prácticas tradicionales nocivas, con especial atención a la mutilación genital femenina. La experiencia me transformó por completo en una firme defensora de los derechos de los niños africanos.
Después de trabajar durante diez años con Save the Children, renuncié a mi trabajo para instalarme con mi familia en Liberia, donde comencé una carrera como consultora. Descubrí GFC en septiembre de 2019 como parte de mi búsqueda de nuevas oportunidades de consultoría. Me emocionó muchísimo encontrar finalmente una organización internacional de derechos del niño que realmente cree en empoderar a los actores locales para que impulsen sus propios planes de desarrollo.
¿CUÁL CREES QUE SERÁ LA PARTE MÁS DIFÍCIL DE TU TRABAJO? ¿QUÉ SERÁ LA MÁS SATISFACTORIA?
Permítanme comenzar con la parte más satisfactoria. Llegué a GFC con muchos años de amplia experiencia práctica adquirida trabajando con organizaciones locales e internacionales. Lo que me entusiasma de GFC es el hecho de que la organización no tiene el enfoque tradicional de los donantes, en el que el foco está puesto en satisfacer las necesidades de los donantes. GFC permite a los actores locales de base ser los agentes de su propio desarrollo. Como africana, esto me da la oportunidad no sólo de implementar un proyecto para GFC, sino de apoyar a las organizaciones locales para que desarrollen ideas y estrategias innovadoras para abordar las causas profundas de los problemas que impiden que las niñas y los niños disfruten de sus derechos humanos.
Ahora, la parte más difícil de mi trabajo será cambiar la mentalidad que tienen las organizaciones locales sobre los donantes. Lamentablemente, muchas organizaciones locales están acostumbradas a implementar proyectos para donantes y tienen una comprensión limitada del valor de las alianzas estratégicas en las que tienen poder de negociación. Sin embargo, confío en que a través de este proyecto, que se centra en poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas y que está financiado por la Fundación NoVo, nuestros socios locales verán el valor de tomar la iniciativa.
¿POR QUÉ CREES QUE EL TRABAJO DE GFC ES IMPORTANTE?
La labor de GFC es importante porque devuelve el poder a las organizaciones locales. Es una de esas pocas organizaciones internacionales que cree en el apoyo a las organizaciones comunitarias y a la sociedad civil en general para generar cambios duraderos, porque el desarrollo sostenible no puede darse sin una sociedad civil fuerte, incluidas las organizaciones comunitarias.
#FUNDATOS SOBRE AME
¿CUÁL ERA TU JUGUETE FAVORITO CUANDO ERA NIÑO?
¡Guau! A menudo asumimos que todos los niños del mundo juegan con juguetes, pero no siempre es así. No recuerdo tener ningún juguete favorito en particular. Sin embargo, sí recuerdo que mi padre me compró un walkman con radiocasete en los años 90 y fue el mejor regalo que jamás me ha hecho.
¿QUÉ QUERÍAS SER CUANDO CRECIERAS?
¡Presidente de una nación! Ahora, como adulto, he comprendido que la presidencia consiste en hacer del mundo que te rodea un lugar mejor.
¿CUÁL ES LA COSA MÁS EXTRAÑA QUE HAS COMIDO NUNCA?
¡Carne cruda en Etiopía!
¿TIENES ALGO QUE TE MANIJE?
Una de mis mayores molestias es el mal servicio al cliente.
SI PUDIERAS TENER ALGÚN SUPERPODER, ¿CUÁL SERÍA?
La capacidad de transformar algunas zonas rurales de África en un Disneylandia para que las niñas y los niños disfruten al máximo de su infancia.