Justicia de género, poder juvenil
Justicia de género
Día Internacional de la Niña: Celebramos la histórica prohibición del matrimonio infantil en Sierra Leona
El Día Internacional de la Niña es un poderoso recordatorio para honrar los esfuerzos incansables de los jóvenes defensores y las organizaciones que trabajan para construir un mundo donde cada niña pueda alcanzar su máximo potencial, libre de discriminación, violencia y pobreza. Este Día, que se celebra durante todo el mes de octubre, nos convoca a celebrar los increíbles hitos alcanzados en favor de los derechos, el bienestar y el empoderamiento de las niñas. Uno de esos logros es la reciente prohibición del matrimonio infantil en Sierra Leona, una victoria histórica en la lucha por los derechos de las niñas que protege a innumerables niñas del matrimonio precoz y sus consecuencias para toda la vida.
El matrimonio infantil, precoz y forzado ha devastado las vidas de innumerables niñas en África, privándolas de su infancia, educación y salud, y sigue siendo un problema crítico que las propias niñas plantean constantemente en la Cumbre de Niñas Adolescentes (AGS), una reunión bianual que reúne a niñas adolescentes de diversos orígenes para amplificar sus voces y defender sus derechos.
La firma de la Ley de Prohibición del Matrimonio Infantil en Sierra Leona el 2 de julio de 2024 marca una victoria monumental para todos aquellos que han defendido incansablemente los derechos de las niñas. Esta nueva ley introduce una pena mínima de 15 años de prisión y una multa de aproximadamente 1 TP4T4,000 para cualquier hombre que se case con una niña menor de 18 años. También prohíbe la cohabitación con un niño e impone multas a cualquiera que organice, ayude o asista a tales ceremonias matrimoniales. La noticia de esta legislación fue recibida con gran celebración entre los adolescentes de ambos sexos, los socios de la GFC y las organizaciones no gubernamentales nacionales e internacionales que han pasado años creando conciencia sobre los efectos devastadores del matrimonio infantil, precoz y forzado.
Según las Encuestas Demográficas y de Salud de Sierra Leona de 2019, el 30% de las niñas de Sierra Leona se casan antes de cumplir los 18 años. En 2020, había 800.000 niñas casadas, la mitad de las cuales se casaron antes de cumplir los 15 años. Según UNICEFLos matrimonios infantiles contribuyen a la elevada tasa de embarazos adolescentes en Sierra Leona, donde, trágicamente, las complicaciones del embarazo son la principal causa de muerte entre las niñas de 15 a 19 años de edad”. Según Human Rights Watch (HRW)). El matrimonio infantil es un problema profundamente arraigado no sólo en Sierra Leona sino en toda África, donde las normas tradicionales y culturales a menudo empujan a las niñas a casarse antes de llegar a la edad adulta. Esta práctica no sólo les priva de su infancia, sino que también limita gravemente sus oportunidades de educación e independencia económica, perpetuando ciclos de pobreza y desigualdad.
El impacto inmediato de esta ley es la protección legal que ofrece a las niñas, garantizando que ya no se las obligue a casarse contra su voluntad. Esta legislación envía un mensaje contundente a las comunidades: el matrimonio infantil ya no es aceptable. Desafía las normas culturales arraigadas y empodera a las familias para que prioricen la educación y el bienestar de sus hijas.
Uno de los resultados más importantes de esta nueva ley será su papel en la promoción de la educación de las niñas. Las investigaciones muestran de manera consistente que las niñas que no son obligadas a contraer matrimonio precoz tienen más probabilidades de permanecer en la escuela, completar su educación y contribuir significativamente a sus comunidades y a la economía. Por lo tanto, esta ley no es sólo una herramienta de protección; también es un catalizador para el empoderamiento, permitiendo a las niñas perseguir sus sueños y liberarse de las limitaciones del matrimonio precoz. Sin embargo, si bien la aprobación de esta ley es un logro significativo, su implementación efectiva requerirá esfuerzos sostenidos. Cambiar prácticas culturales de larga data es un desafío y es probable que haya resistencia de algunos sectores. Mientras celebramos este hito histórico, debemos permanecer vigilantes y firmes en nuestro compromiso con el trabajo que tenemos por delante. Si bien las reformas legales, como la prohibición del matrimonio infantil, son cruciales, representan sólo el paso inicial hacia un cambio significativo. Para traducir esta ley en beneficios tangibles para las niñas, debemos seguir interactuando activamente con los líderes comunitarios, los padres y los educadores para cambiar las normas culturales y eliminar las presiones sociales que impulsan el matrimonio precoz.
Además, las iniciativas educativas son igualmente importantes: dotan a las niñas de las herramientas, los conocimientos y las habilidades necesarias para perseguir sus sueños y contribuir a sus comunidades. La educación empodera a las niñas no sólo académicamente, sino también social y económicamente, permitiéndoles desafiar las normas existentes y defender sus derechos.
Igualmente esencial es la inclusión de las propias niñas como participantes activas en el camino hacia la realización de sus derechos. Sus voces y perspectivas son vitales para dar forma a intervenciones y programas eficaces que aborden directamente sus necesidades y aspiraciones. Empoderar a las niñas para que tomen la iniciativa en los debates sobre su futuro crea en ellas un sentido de autonomía y confianza en sí mismas que es crucial para su desarrollo.
Además, se debe seguir abogando por que el gobierno establezca sistemas de apoyo integrales para garantizar la seguridad, la salud y el bienestar de las niñas, lo que incluye el acceso a la atención sanitaria, los servicios de asesoramiento y espacios seguros donde las niñas puedan expresarse libremente y buscar ayuda cuando la necesiten.
Sólo mediante este enfoque holístico podremos garantizar que la ley no sólo exista en el papel, sino que también conduzca a un cambio real y transformador en toda Sierra Leona. Es una responsabilidad colectiva que requiere la colaboración de todos los interesados, incluidos los gobiernos, las organizaciones no gubernamentales, los miembros de la comunidad y las propias niñas.
Desde 2020, los jugadores de Lotería Popular de Códigos Postales han ayudado a GFC a transformar las vidas de miles de niños y jóvenes en todo el mundo. Estamos profundamente agradecidos a los jugadores de People's Postcode Lottery por apoyar la Cumbre de Niñas Adolescentes.